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Daniel De La Barra propone re-editar y distribuir el “Boletín mensual de la Sociedad  de Atracción de Forasteros” con falsos proyectos de modernización de la ciudad para cuestionar los procesos homogeneización y resignificación del espacio urbano, que modifican nuestros flujos y manera de practicar la ciudad.

En 1908 nació en Barcelona la Sociedad de Atracción de Forasteros, colectivo integrado por miembros de la burguesía catalana con la misión de ofrecer información turística a los visitantes de la ciudad y el resto del territorio español. Su actividad no se limitaba a interpretar la realidad, sino también a desproveerla  de sus cargas sociales, sedimentadas en los elementos arquitectónicos urbanos a lo largo de los años, y rediseñarla como un símbolo meramente identitario e icónico.

Los empresarios y políticos que dominaban entonces la ciudad, actuando a través de esta asociación, crean el “Boletín Mensual de la SAF” (más tarde “Barcelona Atracción”), revista que se distribuyó a lo largo de la primera mitad del siglo XX por muchos países del mundo, promoviendo una campaña en la que se negaba la realidad social de una ciudad formada mayoritariamente por integrantes de la clase obrera. En su lugar, emergía una nueva urbe convertida en monumento, consecuencia histórica del dominio de la clase alta capitalista que conseguía de esta manera reformularla a través de los intereses privados del espacio público.

Estos procesos de intervención del poder en los significados urbanos no han disminuido. Al contrario, los barrios más transitados de las ciudades como Barcelona se ven continuamente afectados por la apertura de cadenas multinacionales que, aventajadas por la tendencia oligopólica del neoliberalismo y el capitalismo financiero, imponen una homogeneización en los comportamientos y las estéticas que subyacen en todas las ciudades del mundo.

En este aspecto, cada apertura de las cadenas multinacionales es también una muestra de la imposición violenta de los núcleos de poder que, apoyados por la desterritorialización de los flujos de capital, consecuencia de la transformación financiera del capitalismo, se imponen sobre las identidades y los sedimentos históricos que deberían caracterizar los diferentes territorios. Es un síntoma más que hace un balance de la aceptación y la asunción grupal de las dinámicas impuestas jerárquicamente.

El proyecto parte de una investigación acerca de este fenómeno de homogeneización y privatización del espacio urbano  para su consumo a través de la re-edición y distribución del “Boletín mensual de la Sociedad de Atracción de Forasteros”, que promovía la idea de que el turismo podía modernizar Catalunya. 

La re-edición del boletín nos sirve como herramienta de análisis de este fenómeno social del que es actualmente víctima Barcelona, como todas las grandes urbes desde el triunfo del neoliberalismo.

Para esto se generan acciones, intervenciones públicas y laboratorios que crean un diálogo entre monumentos históricos, el espacio público y diversas estrategias privadas destinadas a su actual funcionamiento de consumo. Las piezas y registros de las acciones nos sirven para ilustrar el Boletín y promocionar  proyectos de modernización de la ciudad  que en realidad nunca se hicieron y , de este modo, cuestionar la resignificación del espacio urbano, que condiciona directamente los flujos, actividades y modos de vernos o pensarnos como practicantes de una ciudad que silenciosamente se vuelve inhabitable.

Finalmente, se llevará a cabo una jornada abierta al público  el 18 de julio con el artista Domènec, donde se debatirá las intervenciones desarrolladas y generarán propuestas nuevas para finalmente desarrollar el contenido de la publicación de manera participativa.